la Gran telaraña

Vuelvo a escribir, con un dejo de miedo y desconfianza, porque mucha mierda a sido derramada durante el transcurso de los años, yo me reconozco como una persona capaz de soportar las mil calamidades existentes pero en este momento es como tercera vez que no me puedo controlar, es tercera vez que cuando vuelve a caer mierda sobre mi cuerpo no mantengo esa mirada perdida que muchas veces me hace entender y aceptar los momentos por los cuales ocurren las cosas, ya perdí esa mirada, creo que fue capaz de llegar al límite, aquellas apreciaciones hacia mi persona me confunden, me inhabilitan para comprender como un solo ser puede tener tanta maldad dentro de su alma, como pueden pasar los días sin que alguien haga algo para remediar la situación, de verdad, no entiendo, he hecho lo humanamente posible por revertir el curso de las cosas pero por cada paso que doy me haces devolver 10, y esto ya no puede continuar así, lo digo sinceramente, aunque eso no quita que me cueste mucho dejar constancia en este documento que ya me estoy quedando sin aire por intentar hacer que tus actos se vean pequeños, por cubrirlos con nubes de colores, por darles el brillo que nunca tuvieron, y por besarlos para que los vientos se encarguen de mostrarles al mundo, a tú mundo, que todo está bien y que nada es necesario mejorar. Estoy muy cansado, si no se dan cuenta por cada día que pasa voy perdiendo el brillo en mis ojos, y si logran apreciarlos es porque mi alma no ríe, solo es capaz de llorar, solo soy capaz de llorar, aunque últimamente estos llantos se van transformando poco a poco en ira en impotencia, en mierda… en más mierda, y lo se… con esto continuo en el puto círculo vicioso del cual quiero salir, pero no puedo dejar de hacerlo y si tengo que perder todo lo que he logrado (si es que he logrado algo) pues que así sea… en estos momentos si sonrío es por cortesía, si te mimaba era porque me lo pedías, por fin me he dado cuenta de que no era porque lo sintiera, y eso duele tanto que no creo que seas capaz de comprender. Si mis ojos se vuelven volvían hacia los tuyos era porque siempre mantuve la esperanza de que las cosas cambiaran, hasta el día de hoy en el cual abrí mis ojos y deje de soñar

quizás tengas razón, quizás si soy ese pendejo de mierda que no sirve para algo, que pasa sus días solo fastidiando al mundo, que no merece sentarse en la misma mesa, quizás tengas razón al decir que soy una mierda. Sólo recuerda, todo te lo debo a ti